Las medidas de aislamiento que los diferentes países se vieron obligados a tomar para hacer frente a la pandemia de coronavirus produjeron en poco tiempo cambios rápidos y visibles en el medio ambiente por la reducción de la contaminación y la circulación de las personas.

El último caso se produjo India, donde luego de 30 años es posible ver la Cordillera del Himalaya desde 200 kilómetros de distancia gracias a la disminución de la contaminación que provocó el cese de actividades industriales y la restricción del tránsito. Se trata de una de las cordilleras más largas del mundo, famosa por tener el monte Everest, la montaña más alta del planeta.