Se ha dicho en diversas ocasiones, que los 5 antiterroristas cubanos que fueran injustamente condenados en los Estados Unidos y cuya libertad hemos venido exigiendo con creciente empeño, son hombres de cultura y de pensamiento.
Dos de ellos, poetas. Otros, diplomáticos de carrera, y uno instructor de vuelos. Todos, entonces, profesionales y artistas de primer nivel, creadores de ideas, en una circunstancia en la que las ideas -para decirlo en palabras de Fidel- “son más poderosas que las armas”. Sigue leyendo