Un dramaturgo que intenta ser “agente de cambio”, formado en la escuela de las “revoluciones de colores”, lidera la convocatoria a una marcha el 15 de noviembre en Cuba, con fines desestabilizadores.
Por: Enrique Ojito

García Aguilera (segundo de derecha a izquierda) durante su participación en el taller Diálogos sobre Cuba, realizado en Madrid en el 2019.
Debió sentirse como pez en tierra. Habría que pensarlo por dos razones claves: por un lado, acudió a aquel taller en el campus de Madrid de la Universidad de Saint Louis, de Estados Unidos, en su condición de artista y joven intelectual —lo declaró el propio dramaturgo cubano— y, por otro, el encuentro, celebrado del 12 al 14 de septiembre del 2019, no se detuvo ni por un segundo en la obra de Eurípides, Shakespeare, ni en la de Calderón de la Barca.
¿Qué hacía, en la cuarta versión del taller Diálogos sobre Cuba, Yunior García Aguilera, hoy el rostro visible de la marcha anunciada para el 15 de noviembre, denegada por las autoridades locales debido a la ilegitimidad de sus propósitos? ¿Quiénes convocaron y asistieron a la cita en la capital española? ¿Es tan santo como se pinta este actor y director de teatro, nacido en Holguín?